Parada: San Martin de los Andes
Cada vez que veía las fantásticas y espectaculares fotos de la Patagonia argentina me reprochaba que no había hecho (por ejemplo) La ruta de los Siete Lagos, o recorrido Neuquén, que está rodeada de lugares increíbles. Estuve por Santa Cruz, y conocí El Calafate, El Chaltén, y también estuve por la bella Ushuaia, pero salvo por fotos e imágenes no había estado en Bariloche. Loco, ¿no? Con lo viajera que me presento… Pero siempre le dediqué mucho a los viajes por afuera de mi país- sin desconocer sus bellezas- quizás sí postergándolo un poco. Sabía que en algún momento llegarían…
Esta vez salimos desde Buenos Aires a San Martín de los Andes, previo stop a la ida en General Acha, La Pampa.
[pullquote]En este post me ocupo de esta ciudad neuquina, pintoresca y de espíritu joven, y de las paradas, lagos y recorridos elegidos allí.[/pullquote]
Playita de Yuco: es increíble el paisaje! Una colección de árboles, que bordean el azulísimo lago Lacar. Y piedras de todo tamaños, señalando los caminos y a orillas del agua. el sol se da intenso, pero apenas uno se corre a la sombra se siente el aire fresco y seco de lugar que despierta a cualquiera..Tirar piedritas, meter los pies en el agua fría y juntar maderitas fueron los pasatiempos de Renata y, los nuestros. Además, el encantamiento con semejantes vista. Claro está. Algún grupito de amigas, amigos…Familias con chiquitines, y parejas de gente más grande (que cuando se los espía en este tipo de lugares descuentan años y hasta parecen chicos que juegan entre si).
Hua Hum, esta casi llegando al paso internacional con Chile…es otra playita a 45 km de San Martín…..Allí hay una hostería con un bar y terraza con vistas al lago, y muelle propio… Algunos extranjeros y otros cuantos argentinos tenían la suerte de estar relajando allí.
Nuestro picnic, entre piedritas, mirando el lago….Amo los picnics, me parecen programas súper, son siempre divertidos, pero en este escenario es un plan de lujo. Cerca teníamos una casa rodante de una pareja alemana de unos sesenta años. (Un plan divino para esa edad, pero hay que bancarse ese ritmo y supongo que no era la primera vez que viajaban así) ,…Más tarde nos pusimos a caminar. ¿ Qué encontramos? Apenas a unos metros de nosotros, nos miraban una vaca preñada y un ternero. Lo de siempre, ¿no?
Conocimos también el Lago Meliquina, y el pequeño desarrollo de villa turística que tiene hasta hoy; cuestión que puede cambiar en unos pocos años…A esta preciosa y encantada zona dudo que tarden en llegar inversores o gente que quiera construir. Con algunas casas y cabañas, tiene por ahora algún que otro bar y servicio de comidas y platos orgánicos y de sabor local, pero aún se la ve virgen. Y eso es lo mejor y lo peor a la vez. Hasta ahora unos pocos la conocen pero en poco tiempo es muy probable que se pueble y llene por demás. Es el orden las cosas en el mercado de los viajes y el turismo…Pudimos charlar, con una chica que atendía el primer parador bar que hubo de pescadores y cazadores, y nos contó que enero y febrero son meses de vida y movimiento total pero que el resto del año, es muy poca la gente que viaja por allí.
De las caminatas por la ciudad de San Martín, rescato muchas cosas. Las calles con esas simpáticas casas de madera, gente de montaña con aire relajado, tanto los jóvenes como los viejos. Lindo lugar para vivir. Viviría allí. Lo agrego a mi lista mental de lugares soñados para quedarse. La plaza Sarmiento, rodeada de lindos restos, bares y locales. Era parada obligada para Renata; y su hora de jugar. Perfumado y decorado por rosas el parque, tiene árboles con su nombre al lado (como cualquier jardín botánico), una fuente que salpica… Y claro los juegos de plaza con chicos como abejas, es un lindo punto de la ciudad para estar.
A 12 km está la Villa Quila Quina, donde hay casas de los 50´,y en la playa te recibe una fila de canoas y un largo muelle…Tiene dos paradores bares, donde se vende torta frita, cervezas, empanadas y otras comidas. Hay además una pequeña capilla de madera que esta frente al Lago Lacar. Lindo lugar para rezar. El lago Lolog es de agua tibia y su playa se llama bonita. Lo es. Todo el lugar es bonito, en la villa se asoman casas increíbles de madera y piedra. Algo escondidas se las ve, como si fueran mitad sueño, mitad verdad. No vaya a ser que uno se tiene en ocuparlas. Es que hay algunas que se las ve tan solas…Necesitan gente adentro.
Además de ver jardines de concurso; aquí siempre hay rosas…De nuevo quisimos hacer picnic en otra playita, esta vez dentro de un camping desierto, aunque con rodeados por gallinas. El color del Lolog y la paz reinante allí, coronaron uno los momentos más sublimes del viaje por San Martin de los Andes.
Restaurant Con Renata, a veces es complicado ir a comer, pero no hay chance de que no lo hagamos. Una de las últimas noches fuímos al restaurant Ku, que tiene unos 27 años de historia en la ciudad y esta frente a la Plaza Sarmiento. Elegimos trucha a la manteca negra con alcaparras, y unos capelletis de ciervo. Para tomar, cerveza artesanal Lacar. (Negra y Rubia). Muy rico todo y buen servicio-
Hospedaje Elegimos el Hotel Rotui, tipo cabañas apart en el centro de San Martin de los Andes. Super bien ubicado, y de una decoración divina, muy cómoda y con desayuno que vas a buscar y tomas en la cabaña.
Muy linda reseña Dol, me dieron ganas de volver, siempre respira tu texto, aires de verdad.
Que lindo Ine, el aire puro de San Martín de los Andes es envolvente-Divino escondite en Neuquén
Muy lindo viaje y una excelente guia para hacer turismo.
Gracias Patricia! que bueno que te gustó…Precioso San Martín de los Andes
lol!! Qué lindo como describís el sur… Todo los lugares que nombras me traen tan lindos recuerdos de la infancia y de grande.
Gracias traerlos a mi memoria!!!
Besos
Jose
Jose, te imaginaba a vos de chiquita por esos lugares. Que bueno haber vivido allá!….Beso enorme.